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Recientemente, Cetaqua Barcelona ha sido acreditada como Centro de Apoyo a la Innovación Tecnológica. Un reconocimiento que otorga el Ministerio de Ciencia e Innovación a los centros tecnológicos que transfieren el conocimiento científico generado para que las empresas lo apliquen en su estrategia y se convierta en una realidad palpable.
En el Día Mundial de la Creatividad y la Innovación, hablamos con Carlos Montero, Director General de Cetaqua, Centro Tecnológico del Agua.
Los Centros de Apoyo a la Innovación Tecnológica son por excelencia los intermediarios entre la generación del conocimiento y empresas. ¿Qué significa este reconocimiento para Cetaqua?
La vocación de Cetaqua es la de transferir el conocimiento que se genera en el entorno de la investigación e innovación, para que tenga un impacto en el sector del agua, ya sea los con ciudadanos, la administración, el medio ambiente o las empresas. Esta acreditación confirma la efectividad de nuestra vocación.
¿Qué tan importante es la transferencia del conocimiento en la estrategia de Cetaqua? ¿Algún ejemplo?
La transferencia comienza en la etapa de ideación. Para lograrlo involucramos a expertos de negocio en las fases más tempranas de conceptualización de los proyectos. Esto permite que cuando llega el resultado, ya está orientado a resolver una necesidad, y el usuario lo espera. Idealmente, todo el proyecto se realiza con un seguimiento efectivo de su aplicabilidad. Un ejemplo reciente es el proyecto Reveal, para detección y monitorización de SARS-CoV-2 en aguas residuales, donde junto con nuestros socios desarrollamos la metodología de detección del virus en aguas residuales y construimos algoritmos que permiten anticiparse a la evolución de la pandemia, ciudad a ciudad e incluso barrio a barrio. Esto se testeaba en operaciones reales, y una vez los resultados se validaban, se ponía en servicio para la toma de decisiones.
Cada vez es más necesario que las empresas incorporen la innovación tecnológica en su estrategia. ¿En qué líneas fundamentales debe enfocarse?
Las empresas del sector del agua tienen unas líneas de desarrollo tecnológico bastante estable desde hace décadas: recursos hídricos, producción, reutilización, redes, tratamiento… estas líneas permanecerán porque son el core de la actividad, pero sin olvidar que la gestión es de un elemento físico (el agua). La digitalización tiene la capacidad de transformar la manera en que se realiza la gestión del agua y del medio ambiente. Los compromisos y necesidades de sostenibilidad y economía circular ahora son vehiculares, y por lo tanto las líneas de desarrollo “clásico” se han de orientar a servir objetivos de sostenibilidad ambiental, económica y social.
Los centros de Cetaqua en España (Barcelona, Andalucía y Galicia) también han recibido la certificación de la UNE 166002:2014 en Gestión de la I+D+i. ¿Qué implica?
Cetaqua ha ido desarrollando un sistema de gestión de la innovación propio y muy adaptado a nuestra labor. Este se traduce en una eficiencia en la consecución de fondos europeos muy por encima de la media, junto con una excelente capacidad de generar resultados de valor y transferirlos. Con esta certificación formalizamos nuestras herramientas y métodos de trabajo, lo que facilita a las nuevas incorporaciones que conozcan y se alineen con esta metodología desde el primer día.
¿Cuáles son los próximos pasos/retos a los que os enfrentáis?
Hemos ido alcanzando diversos retos a lo largo de nuestra vida como Cetaqua: consolidación, liderazgo en agua y más recientemente la intersección con las tecnologías digitales. Ahora es clave la agilidad, entendida como flexibilidad y adaptabilidad al mercado, con proyectos más abiertos y colaborativos con los usuarios, clientes y operadoras, minimizando el tiempo entre la ideación y la transferencia e implementación.